LA OFICIAL

Una mañana mientras mi novio tomaba la ducha, ingresó una llamada a su celular que por casualidad se le olvidó en el sofá. Contesté el móvil y era la voz de una chica quien muy contenta dijo:

- Hola mi amor, te extrañé y quería escuchar tu voz antes de ir a la universidad, vienes por mí a la hora de salida ¿Qué te parece?

Apenas dejó de hablar corté la llamada, me tranquilicé y esperé a que mi novio saliera y pregunté:

- ¿Quién es mi pata número tres?

Le salieron unas carcajadas y me dijo: - ¡De dónde sacas eso cariño! deprisa tomó el celular y puso muy mala cara.

- ¡Por qué contestaste! exclamó, pudo haber sido una llamada delicada. 

- ¡Claro que fue delicada! repliqué. ¡Yo era la única! ¡El amor de tu vida!¡Yo te creí todo! ¡Cómo pudiste!. Busqué mi bolso y salí de prisa, estaba muy furiosa y destrozada a la vez, llamé de emergencia a mi mejor amiga, apagamos los celulares, lloramos juntas y salimos a caminar.

Cuando regresé a casa por la tarde, prendí mi celular y recibí notificaciones de varias llamadas, volví a apagarlo y me arrojé sobre la cama,  las lágrimas inundaron mi rostro recostado sobre la almohada. Estuve así por varios días, cuando salía con mi familia siempre regalaba sonrisas y buenos momentos, pero eran las noches en mi cuarto, cuando el llanto y la tristeza me invadían hasta quedarme dormida.

Un día salí a realizar unas compras al supermercado y para coincidencia, él me encontró, se acercó un poco avergonzado, pidió que platicáramos, yo acepté gustosa porque cuando lo vi todo el amor que sentía por él volvió a hacerme sentir feliz. Después de muchas explicaciones vacías, él dijo algo que nunca voy a olvidar.

- Yo te amo y siempre serás la oficial, ellas siempre me escriben o me llaman, pero yo no las hago caso, yo te amo a ti, estás en mis planes, sin ti no podré ser feliz.
Fue como una puñalada a la última vida del amor que yo tenía por él, este dolor sí que llegó hasta el alma. A partir de ese momento me di cuenta que la única que amaba era yo. Después de un silencio me armé de valor y con los ojos hechos agua respondí:

- ¡Tú! siempre fuiste para mí la única persona que duplicaba mi felicidad, el que agregaba un toque especial a mis fechas más importantes, el único en quién confiaba más, pero en cambio para ti; yo solo era la oficial. Lo siento mucho pero hoy empieza la verdadera vida para mí, y tú te acabas de esfumar de mis planes.

Publicado el 04-02-2019
Nota: Basada en una situación cotidiana con un toque de fantasía.
Autor: Raúl FerChi
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